Jesucristo al hacerse hombre ha querido compartir nuestra suerte y experimentar nuestras alegrías y sufrimientos. Él mismo se vió obligado a huir junto con su familia para salvar su vida. Esta es una de las realidades que millones de personas, hoy en día, están viviendo y que el Papa nos invita a no ser indiferentes ante esto a través de su mensaje por motivo de la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado que se celebra el día 27 de septiembre de 2020 con el título: Como Jesucristo, obligados a huir. Acoger, proteger, promover e integrar a los desplazados internos.